lunes, julio 31, 2006

Triste pero cierto

Veo detrás de las costillas de este blog y qué me encuentro: cría fama y échate a dormir. El ejemplo más claro de en qué me he convertido, las palabras que conforman mi perfil destruido:
DESFLORACIÓN.
MULTIORGÁSMICA.
ORGASMOS.
Definitivamente, hay que empezar a vetar términos en este espacio. Inmaculados como nunca y siempre.

domingo, julio 30, 2006

La vuelta al mundo en ochenta caídas

Cómo un regordete niño mejicano trasapasa fronteras y estilos.

Versión original:



Versión "The ring":



Versión "Primer impacto":



Y hasta en chino -con restos de sustrato árabe y ruso-:



Pero hay mucho más, incluso los aburridos de siempre.

A veces, la fama es tan simple...

sábado, julio 29, 2006

Modas veraniegas

Me he esforzado en explicarle a varias caras barbudas alguna vez que, en el universo femenino, no es desorbitado llevar bragas por debajo del pijama. Es, sobre todo, útil, en caso de que decidas ponerte una compresa.
No obstante, no encuentro un significado a la moda-juvenil-estival-macarra: ¿alguien puede decirme por qué nuestros jóvenes llevan un calzoncillo por debajo del bañador? ¿Qué objeto persigue esta forma de vestimenta?
Dormir en la playa bien vale una respuesta.
Fdo. La Dama de la Rosa, flor infatigable




Postpost: Vale, parece que no soy la única que se lo plantea.

lunes, julio 24, 2006

Un chulo sin pasodoble

Un poco de intrahistoria: las cuentas del Gran Capitán nos hablan de un líder militar que estuvo al servicio de los Reyes Católicos. Sus gastos inquietaban a los monarcas hasta el punto de que un día decidieron pedirle un recibo de sus inversiones. Gonzalo Fernández de Córdoba, que así se llamaba el hombre de acero, les entregó esta pequeña misiva:
"Por picos, palas y azadones, cien millones de ducados... por limosnas para que frailes y monjas rezasen por los españoles, ciento cincuenta mil ducados... por guantes perfumados para que los soldados no oliesen el hedor de los montones de enemigos muertos, doscientos millones de ducados... por reponer las campanas averiadas a causa del continuo repicar a victoria, ciento setenta mil ducados... y, finalmente, por la paciencia de tener que descender a estas pequeñeces del rey a quien he regalado un reino, cien millones de ducados".
Escupiendo al suelo. ¡Con dos cojones!


Fdo. Xantai Ribadulla, soltero porque sí y madridista

viernes, julio 21, 2006

Los más

¿Habéis oído algo de los planes de Antena 3 de hacer un programa con los famosos "más deseados"?
Inocentemente visité la página de votación y, muy a mi pesar, me cuesta encontrar mi mujercita estelar. Cómo se nota el campo al que tiene acceso la cadena: te recortan tanto que seleccionas de lo peor, lo menos malo (está bien, claudico, estoy siendo demasiado crítico pero tampoco es que me encuentre muy lejos).
Aunque lo mejor de todo es entrar en los hombres más deseados y encontrarte con este tipo, por ejemplo.


Un programa fiel para un país en el que, si atendemos a las encuestas, 3 de 4 españoles se consideran a sí mismos "guapos". ¡Vivan los espejos que nos acostumbran a nuestra fealdad!

jueves, julio 20, 2006

Nocturnidades

Ahora que soy un joven abúlico al que le pesa la nueva nocturnidad, me agarro a los pequeños ídolos que se han ido forjando a lo largo de la temporada televisiva. Buenafuente hace tiempo que está de vacaciones y Eva Hache, que se fue más tarde a disfrutar del descanso estival, nos deja esa retahíla de momentos en su "Especial Hache".
De esta última maraña de memoria rescato a este hombre y su temazo, del que me tatuaría su estribillo pegadizo en el bazo -"Así me lo aprendí yo" es mi lema, "Taxista guay" mi tema-:



Y, cuando no me pesan los ojos, llego a esa isla de la madrugada que es "Cuatrosfera" y mi último descubrimiento: "Mission hill". Si queréis ir con ojeras a trabajar, es una recomendación.
Postpost: Pastor de Guam, cantemos con la garganta hecha fuego.

miércoles, julio 19, 2006

Juegos prohibidos

No contar con ordenador sano y que la Biblioteca no tenga, por espacios semanales, conexión a Internet, son dos escollos insalvables -¿sabréis perdonarme?-.
Sorprendente, o más bien no, este titular encontrado de buceo por la red. Y es que las instituciones intangibles cada día más pierden su vigor, dando paso a una forma más inteligente de vivir.
El matrimonio es algo que me aterra. Se me antoja un invento cristiano para garantizar la supervivencia moral del hombre y, más al fondo, un pesado suplente: como diría Pushkin, la costumbre es el mejor -o al menos el único- sustituto de la felicidad.
Cambiar cónyuges como cromos porque las personas, en realidad, no se aman sino que se adhieren por tiempo indefinido, esto es, hasta que la paciencia no estalle. Quizá sea de esta opinión porque creo en el amor eterno, pero no en el amor eterno entre dos personas. Es más, rácano-avaro como soy, por mucho ingenio exprés que me apoye en mi separación, romper una relación marital se me presenta como un gasto profundo que bien puedo prevenir.
A este paso, arreglar divorcios será un negocio multimillonario y, como suban los precios, al final todos nos convertiremos en vieneses que sueltan esa típica frase austríaca:
"Divorcio nunca, asesinato quizá".


Rellenad vuestros bolsillos si no queréis vivir en pecado.

jueves, julio 13, 2006

Una carroza

Esta semana, al fin, tuve la oportunidad de ver esa serie tan poco comentada aunque enormemente publicitada que es "Queer as folk". Lo cierto es que fue una experiencia un tanto decepcionante, esperaba algo más oculto en algo que nos llega como aparente novedad: ni los personajes me produjeron empatía, ni la dispersión de reflexiones merecía la pena por no llegar a puerto alguno (monólogos interiores del tipo: "A veces creo que me gustaría ser lesbiana... no, pensándolo mejor, tener que comer coños... ugghhh").
Más bien, ha sido como ver pasar una carroza del Día del Orgullo Gay, llena de colores y brillantina y con la pesadez de un tópico. Nada más que una fiesta de música abakalada, a pesar de que, en el fondo:
Queer as folk: El sexo tiene un peso específico en la trama.
Cine X: El sexo es vital.
Queer as folk: Los personajes se pasean semidesnudos.
Cine X: La ropa no tiene importancia.
Queer as folk: Dos lesbianas se besan.
Cine X: Dos "lesbianas" juntan sus lenguas.
Queer as folk: Los desconocidos se miran a los ojos y se masturban.
Cine X: Los desconocidos se miran y practican sexo oral.
Queer as folk: Si no se pronuncia la palabra "polla" un mínimo de quince veces por capítulo, pierde su esencia.
Cine X: Si no has escuchado la palabra "polla" a los cinco minutos de película, ¿qué coño haces viendo la tele tan tarde? Vete a dormir.
Etc., etc., etc.


Pasar el rato es difícil y sólo nos queda una conclusión: cómo echamos de menos a "House".
Fdo. La Dama de la Rosa, flor infatigable

miércoles, julio 12, 2006

Nalgas y masturbación

La naturaleza se tomó seria venganza por mis insultos a las gallinas y a las hormigas voladoras: tres avispas en orgía se ensañaron conmigo y me picaron a la vez. ¿Cuál es el sentido de un ser que ataca para morir? ¿Somos nosotros también, en el fondo, avispas?
Descubres, al menos, que no eres alérgico a su picadura -por algo se empieza-. Pero el día, el monótono día se trunca cuando acudes a urgencias y en esa habitación de intenso olor a blanco y lejía, la enfermera azul te saluda extrañamente:
"A ver ese culo...".
¿Qué pretendes, diplomada? ¿Ni un "hola" o "buenas"? Las primeras palabras que me diriges son "a ver ese culo..." -que no me entere yo de que pasa hambre-. Pero la curva sexual se vuelve cada vez más álgida. La ola de calor, los turnos de tarde, un matrimonio sin objetivos empiezan a turbar la normalidad de la consulta.
Enseño mis nalgas de luna llena y para facilitar la perforación, elevo la cadera, mas:
-¿Qué haces? No te muevas.
-Lo siento, sólo pretendía enaltecerlo.
-¿Ah, sí? Ponerlo durito, ¿no?
¿"Ponerlo durito"? ¿De qué demonios me estás hablando? Travestido perverso, ¿quieres un pedazo? Me alejo ágil y rápido como una hormiguita, seguido por la mirada sucia de la enfermera clavada en la nuca o, más bien, en el culo ya naranja por el bañador.


Y ahora lanzo la pregunta a mis lectores: ¿qué opináis de mi culo? Últimamente estoy perdido en el sentido de mi cuerpo: paseo por delante de los colmillos de una auxiliar y, lo que es peor, en la estación de autobuses de Vigo, un casisexagenario se masturba en los baños -y no, no en la intimidad de un aseo de cuartucho, sino en los retretes verticales- y toma como motivo central, entre otros, mi entrepierna.
Imaginaos un viejo de mirada inquieta que está frente al retrete. Lleva bastante rato "sacudiéndose la últimas gotas". Tú, inocente, te aproximas para orinar siendo la presa de sus miradas: primero a los ojos y después a tu intimidad. Te percatas de que es demasiado el tiempo que su muñeca lleva eliminando restos de orina y ya no puedes seguir, la próstata se te congela.
Te lavas las manos y él sigue allí, impasible o pasible, tomando a otros modelos inocentes como un enfermo voyeur. Te lavas los dientes y todavía no ha acabado pero, al fin, remata la faena, abre la cisterna, luego el grifo, luego el jabón, luego la puerta y se va. Un "que aproveche" mío lo persigue por la rendija.


Hace unos días un amigo mío me decía que sería maravilloso que una chica se masturbase pensando en ti. Quizá, pero cuando has pasado por el tamiz de un viejo verde, tu universo sexual se derrumba. Odio mi vida.
Postpost: Seguro que le suena, amigo Freak Avenger, la chica de la foto. Qué momentos de pura belleza.
Postpostpost: Como siga así, este blog acabará pareciéndose cada día más a este otro: "He de decir que no recuerdo haberme llevado a la boca un rosado tan delicioso desde aquel cunnilingus a aquella menor en Praga". Qué ovarios como puños o "lo que te puedes encontrar, cerdete, en Internete".

martes, julio 11, 2006

Mira tú por dónde

Se comerán por dentro, pero dentro de la Iglesia católica también hay personas con un mínimo de sentido común y perspectiva.
¿Y no las excomulgarán? Tanto esfuerzo a contracorriente...

lunes, julio 10, 2006

Fin

Tu última corona, Rey del Fútbol.

miércoles, julio 05, 2006

La mala educación

En el Parlamento Europeo, ese grupo de corbatas altas de donde salen proyectos como ese, ¿no os acordáis? Esa Constitución que votamos en referéndum y todo y que ya no recuerdo qué salió, pues bien, en ese cortejo elegante y cosmpolita caen perlas como la de este eurodiputado polaco:
"Gracias a Franco y gracias a su familia por salvar al catolicismo del ataque del comunismo en España".
Pero la gente, que es muy maleducada, no ovacionó el sensacional discurso sino que lo abucheó y contrarrestó con vacíos mensajes democráticos. Es que no se respetan las ideas originales, qué seguidismo.

martes, julio 04, 2006

Parejas de baile

José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente idealista en el mausoleo de Gandhi:

"Paz. Vivir en paz, la más grande utopía universal. Con emoción y admiración a Gandhi. De España, un país en paz, un país para la paz".
Federico Jiménez Losantos, el azote socrático:
"Utopía, u + topos, lugar. La paz necesita un lugar. ¿España un país en paz? España ya no es un país, ya no hay un topos, un lugar para la paz".
Me recuerdan a mis abuelos: ella con su pecho voluminoso, que te mantiene a distancia, inabarcable para el abrazo; y él, con su calva brillante, arrastrando la materia conyugal en el "un, dos, tres; un, dos, tres".
Qué grandes pasodobles nacionales.

lunes, julio 03, 2006

No leáis esto

Otra vez, otra pero la misma, el ordenador de mi casa, esa estúpida máquina que decora un pequeño rincón, ha fallado y me ha desterrado a la Biblioteca de Redondela, donde cualquier discurso está cronometrado y no hay tiempo para la inspiración.
Cuando me enfadé, esta mañana, con el ordenador, me di cuenta de lo imbécil que soy y, por extensión, de lo imbéciles que somos todos nosotros. Nos hemos convertido en personajes repetidos, en títeres que se dejan morder por la realidad. Cada vez más, nos tragamos nuestra inocencia por crecer y eso, queridos amigos, nos quita la sencillez de ser felices: reír antes era simplemente esto.
No es que seamos ambiciosos, creo en el hombre ambicioso, en la voluntad de poder, en el deseo de querer ser más de lo que se es. El problema más profundo es que nos transformamos en avaros. Nos colmamos de preocupaciones y, al fin, nos desbordamos en lágrimas. Necesitamos construir sobre la base de objetivos parciales y escribimos la obra reimpresa: trabajo, casa, coche, cuenta, pareja, hijos, dejarse ir.
Y lo triste es el camino, todos nuestros ojos tienen la misma senda. Vamos acumulando y más es menos. Cada cosa es un conflicto, una disputa de a uno o de a dos y, en el fondo, la vida es una caída hacia la melancolía. Lo sabemos e intentamos no verlo, presentizándonos, mas al tiempo que hacemos los mismos planes de futuro.
Sobrevivir, porque no podemos hacer más, no aspiramos a más y no tiene sentido. Sólo cercarnos de cosas sin valor nos llena: nuestras torres de monedas apiladas, cada vez más altas y más robustas, nos dejarán en la penumbra y, después de todo, nosotros mismos seremos únicamente una sombra. Envejecer, morir, medianamente felices, mirando atrás y rescatando las alegrías puntuales.
Rodearnos de nada. ¿Es que no nos damos cuenta de que el mundo es un inmenso vacío, de que todo es una mentira, una palabra sin boca? La realidad es una farsa gaseosa, que puedes cruzar con los dedos o soplarla haciéndola volar lejos. Regodearnos en nuestro teatro predestinado, eso es lo que nos gusta: no dejo de pensar que somos la especie absurda.
Súbamonos al carro de lo escrito y acostémonos exhaustos después de una jornada sin provecho. Vaciémonos, sanguijuelas de nosotros mismos, y al final intentemos encontrar lo que desde un comienzo hemos asesinado. Los imbéciles a sabiendas, la lacrimógena historia occidental.


Quién fuese mariposa o, al menos, luciérnaga...

domingo, julio 02, 2006

Vacas flacas

Habrá que ir ahorrando, no vaya a ser que se nos pasen los clásicos.

sábado, julio 01, 2006

Ollo ó piollo

Guardaos de los idus de marzo y de los guardias de tráfico. No os apuréis en restar puntos y recordad las normas básicas.
Al fin, ¿seremos italianos o europeos?Aunque, en el fondo, todo es lo mismo.